EndsVilles
La mansión de Endsville estaba en venta, y mis padres
decidieron comprarla. Se decían muchas cosas de ella. Yo tenía muchas ganas de
conocerla, porque tenía una rara fascinación por las casas antiguas, y jamás
tenía
Miedo a pesar de las tenebrosas historias que me contaban.
Resulta que en dicha casa, hace muchísimos años, vivía una
familia, compuesta por los padres y su pequeña hija llamada Cambridge. Vivían
muy felices hasta que la niña cumplió los seis años. En ese momento sucedió
algo inesperado, mientras los padres dormían profundamente, su hija se acercó
sigilosamente a su cuarto, llevando un cuchillo con sigo. Con una fuerza
sobrenatural y un odio incontrolable, Cambridge apuñaló a sus padres repetidas veces.
Ella llamó a la policía fingiendo llorar, y le dijo que había escuchado gritos
en el cuarto de sus padres y que cuando llegó los encontró muertos.
Cuando llegaron los agentes, vieron a la pequeña bañada en
sangré, temblando y llorando en un rincón de la casa. Los oficiales empezaron a
investigar, mientras algunos ayudaban a la niña a limpiarse la sangre y a
tranquilizarse. Al terminar de investigar, se llegó a la conclusión de que
Cambridge fue la asesina. Luego de unos días, en el juzgado para menores, el
más prestigioso psiquiatra que trabajaba con la policía, la empezó a analizar.
El diagnóstico del psiquiatra revelaba que ella había
llegado a tal estado de demencia que tenía una fuerza
Sobrenatural. Pero la verdad era que el diablo se había
apoderado de su alma.
Visto el diagnóstico del experto, fue mandada al manicomio,
donde vivió sesenta años. Cumplidos los sesenta y seis años se escapó del
manicomio y fue a su casa, que había permanecido cerrada durante todo ese
tiempo. Se dirigió a la cocina, de donde recogió el cuchillo con el que había
matado a sus padres, y se suicido, incrustándoselo en el centro del corazón.
Cuando conocí la casa, estaban por cumplirse seiscientos
sesenta años de aquel dramático episodio, más aún se estaban por cumplir
seiscientos sesenta y seis años del nacimiento de la diabólica criatura, muchos
Lugareños predecían su reaparición, decían que se
reencarnaría en alguna niña que habitara la casa y se repetiría la
Historia. ¿Sería ese el motivo de que mi padre la hubiera
conseguido tan barata? No sé, pero el dueño tenía unas ganas enormes de
sacársela de encima y mi padre vio en la casa una oportunidad de vivir más
cómodo con su familia.
Cuando entré a la casa, la empecé a recorrer, y vi que
estaba llena de telarañas y de polvo.
Había ratas y arañas por doquier, y esta estaba llena de
pasadizos, pero, no sé por qué el que más me sorprendió fue una apertura en una
escalera.
A la noche, se me ocurrió usar esta historia para asustar a mi
hermana, entonces, me puse una máscara horrenda, y con un cuchillo, fui a su
cuarto a asustarla. Ella gritó a más no poder, y bajó corriendo las escaleras
horrorizada. Yo
la seguí, y vi que se metía por el pasadizo de la escalera.
Luego de unos minutos, me metí en el sótano también. No se
podía ver nada, sólo un rincón alumbrado. Allí fue mi hermana, entonces, empecé
a sentir miedo, vislumbré una sombra acercándose a mi hermana. El corazón me
latía con fuerza, sudaba sin parar, y se me erizaron los pelos... Me quité la
máscara, y tiré el cuchillo, y al instante deseé no haberlo hecho. La sombra lo
agarró, y cada vez estaba más cerca. En un momento, el reflejo de un relámpago
me dejó ver que era la loca. Llegó en frente de mi hermana, y, de un impulso,
le incrustó el cuchillo en medio de su corazón. Salí desesperada del sótano y
subí las escaleras corriendo para alertar a mis padres, y en un momento, con
horror veo una mancha de sangre en el suelo y paro de correr. En ese momento,
me acerco al
espejo gigante que hay en el descanso de la escalera,
agitada de tanto correr. Al mirarme, veo mi mano ensangrentada aferrando un
cuchillo también bañado en sangre, mi cara estaba deformada y en ella había una
sonrisa que no era la mía... Entonces, en medio de la desesperación, comprendo,
horrorizada, que Cambridge estaba dentro de mí, y que me haría matar a mis
padres y yo me apuñalo para que no me haga matarlos. Al hacerlo, lo último que
llego a ver, es a su espíritu reflejado en el espejo, sonriendo malvadamente.
agradezco mucho a alexsanderu y para ver su canal es este enlase:http://www.youtube.com/user/alexsanderu
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